miércoles, 16 de noviembre de 2016

Final de la tia la rica 3

Los lobos obligados por el hambre recurrieron a la siguiente estrategía: la loba, que estaba en celo, aprovechando la luz de la Luna llena, había bajado del monte a beber al rio y después se paseó alrededor de la granja hasta que su olor llegó al  mastín que guardaba el rebaño, haciendo que este abandonase su custodía para ir tras el fuerte olor de la hembra. Cuando el rebaño quedó sin  vigilancia; los tres lobos, un macho y sus dos hijos, que aún no habían cumplido los dos años para alcanzar su mayoría de edad; entraron en la hacienda y mataron seis ovejas y un potro recien nacido. Al saciar su voraz apetito, volviendo de regreso al monte, en plena noche, les atropelló un coche, dejando malherido al jefe de la camada y matando a uno de los hijos.
Por la mañana corrió la noticia de los lobos, junto a la muerte del Xan, un hombre que vivía solo y que apenas recibía la visita de un sobrino que tenía en la ciudad. 
A Xan lo descubrió muerto, a primeras horas del dia, una vecina que le llevaba el pan; una barrita pequeña que le compraba cuando llegaba el panadero con la furgoneta dando bocinazos a la entrada de las casas, y que le lavaba la ropa una vez a la semana. La señora dijo que durante la noche el difunto se había afeitado y aseado; se había cambiado su ropa interior, poniendose una muda limpia y había dejado al lado de su cama, colocado en una silla, para que lo vistieran, el traje negro que guardaba en el armario para las ocasiones, como si estuviese avisado de antemano que le iba a visitar pronto la muerte.

Trás el accidente en que falleció el sobrino de don Sebastián, a traves de la exhumacion de los restos de sus progenitores, se pudieron hacer las pruebas de ADN con las que se demostró la paternidad del sisa.
 La tia la rica tuvo que darle parte de la herencia de su marido; y con las pocas propiedades que le quedó, y la pensión de viudedad se fue sumiendo en deudas. 

La tia la rica acabó atribuyendo el reconocimiento de la paternidad de don Sebastián, del Sisa, a una venganza del santo. Las malas lenguas decían que San Antonio se había enfadado con ella molesto con los pufos que le metía por que siempre andaba empufada con él, con deudas de dinero de cirios y misas de favores que le pedía que nunca le pagaba.

 - ¿No se como voy hacer para pagar las misas que le debo a San Antonio por que este mes viene el recibo de la luz?
  
En sus últimos años la tia la rica dejó de ir a misa y de ser devota de San Antonio. Las amistades no duran eternamente.



¿Y para que quería el sisa el dinero?. Bueno, el sisa es la persona del pueblo menos indicada para ser rico, y así, mientras todos en la comarca fueron llevados a la ruina por el director de un banco sin escrúpulos, que les vendió un producto financiero ideado para quitarles sus ahorros, él se volvió más rico por falta de codicia.





                                       colorin colorado este cuento se ha acabado.



mvf.


No hay comentarios:

Publicar un comentario